Pingyao destaca por su ciudad antigua, Pingyao Ancient City. La ciudad está rodeada por una muralla medieval con sus calles tradicionales chinas.
Para conocer la ciudad, hay que perderse por sus callejones y descubrir sus diferentes edificios históricos. Es pequeña y se puede visitar en poco tiempo.
Llegamos desde Pekín sobre el mediodía y pudimos visitar el centro histórico sin problema. Pasamos una noche y pudimos ver el ambiente nocturno de la ciudad con las luces rojas que iluminan las calles.
• ¿Cómo ir de Pekín a Pingyao?
Compramos el Pingyao Ancient City Ticket, que nos permitió visitar los lugares turísticos más destacados de la ciudad. El precio fue de 125 yuanes y se puede comprar en varios lugares del centro histórico. Nosotros lo compramos en el Pingyao Ancient City Ticket Office, que estaba cerca de nuestro hotel. Este billete da acceso a más de 20 edificios, incluyendo museos y la entrada a la muralla. Gracias al mapa que nos proporcionaron, fue sencillo orientarnos y encontrar estos lugares.
La calle principal de la ciudad es Nan Dajie (Calle Sur). Es una calle muy animada llena de tiendas y puestos de comida. Allí se encuentra la Torre de Gushi (o Torre de la Ciudad), la edificación más alta con tres plantas.
Para entrar a la ciudad antigua de Pingyao, hay cuatro puertas. La puerta del Norte, del Sur, del Oeste y del Este. Las calles principales también llevan nombres relacionados con los puntos cardinales siendo la calle sur, la principal.
Dentro del tíquet también está incluida la entrada a la Muralla. La Muralla de Pingyao se puede recorrer la parte de arriba, casi seis kilómetros y desde allí tenemos vistas panorámicas de la ciudad
La entrada también da acceso a varios museos. Muchas de las casas de la ciudad se han convertido en museos, como el Museo de las Armas o del Comercio. Una de las más importantes es la del primer banco de China, Rishengchang.
También entramos al Ancient Government Building, que solía ser la sede del gobierno de la antigua Pingyao. Este edificio es conocido por las vistas que ofrece desde su parte superior.
Otro de los templos taoístas a visitar es el Cheng Huan Temple.
También puedes ir al Templo de Confucio y el Salón de Artes Marciales para conocer más sobre la rica historia de la ciudad.
Merece la pena quedarse una noche en Pingyao. Cuando anochece, el ambiente cambia y se vuelve más animado con las calles llenas de farolillos rojos que lo iluminan.
Pingyao es un buen lugar para hacer una parada de una noche. Además, es suficiente tiempo para poder visitar la ciudad. Pasear por sus calles es como retroceder en el tiempo, es una antigua ciudad china muy bien conservada. Aún así hay que tener en cuenta que es un lugar turístico y pequeño por lo que puede haber bastante gente.
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