Empezamos nuestra ruta por Londres en el Puente de Londres, que aunque está un poco alejado del centro de la ciudad, se puede llegar fácilmente en metro.
Por ejemplo, con la línea roja en Oxford Circus se llega en menos de 10 minutos a la parada de Bank Station, que se encuentra a 5 minutos andando del Puente de Londres.
Llegamos temprano y no encontramos demasiada gente, aún así, atravesamos el puente y fuimos a Horselydown Old Stairs para tener una mejor vista desde las orillas del río Támesis.
Para llegar allí, tienes que bajar las escaleras y estar en el paseo del río (en la calle Shad Thames), luego, buscar el letrero de John Coraje. Allí encontrarás una pequeña calle desde la que podrás disfrutar de unas vistas increíbles del puente.
Para coger fuerzas para el día, nos dimos un gran desayuno en esa misma calle que nos encantó en el WatchHouse Tower Bridge.
Luego fuimos a visitar la Torre de Londres. Abren a las 10:00 de la mañana y ya teníamos comprados los tickets para esa hora por internet. El precio es de £34.80 (casi 40 euros). Aunque la entrada es un poco cara, es un lugar interesante a visitar con mucha historia por descubrir.
La Torre de Londres fue construida por Guillermo el Conquistador como fortaleza para controlar la ciudad. Durante los siglos, fue utilizada con diferentes fines, como palacio real, prisión, almacenamiento de armas y municiones, e incluso como zoológico real.
En la torre puedes encontrar 6 cuervos que vigilan la fortaleza y según dice la leyenda, el día que desaparezcan, tanto la torre como la monarquía caerán.
Además, alberga las joyas de la corona británica, incluidas las que se usan actualmente en las ceremonias oficiales del Reino Unido, como la coronación de los reyes. No se pueden hacer fotos ni grabar en las salas donde se encuentran las joyas.
Otro lugar destacado es la Torre Blanca, que se encuentra en el centro del recinto y fue lugar de residencia real y prisión. También se encuentran la Capilla Real y el palacio medieval.
Desde la Torre de Londres también puedes disfrutar de unas buenas vistas del Puente de Londres.
Si quieres visitar el palacio con detalle, puedes dedicar toda una mañana. Nosotros lo visitamos ‘rápido’ y tardamos unas dos horas.
Al salir, puedes ir a uno de los mejores miradores de Londres, el Sky Garden. La buena noticia es que es gratuito pero la mala es que tienes que reservar con bastante antelación ya que se agotan con facilidad. El mirador ofrece vistas 360 de la ciudad de Londres y si te has quedado sin entrada gratuita puedes reservar el desayuno (de una pasta más café por unos 10 euros) y subir igualmente.
Nosotros como no habíamos reservado fuimos al The Garden at 120 con una bonita terraza con plantas y flores junto unas buenas vistas a la ciudad. También es una buena opción gratuita para tener unas buenas vistas de la ciudad.
Al salir nos dirigimos a Leadenhall Market. Un mercado cubierto antiguo de Londres con una arquitectura victoriana y actualmente con tiendas y restaurantes. Este mercado inspiró al famoso callejón diagón en la película de Harry Potter.
Pasamos por el Banco de Inglaterra y llegamos a la Catedral de San Pablo (St Paul’s Cathedral). Uno de los símbolos de la ciudad con su característica cúpula. En ella se han llevado a cabo eventos históricos importantes como la boda de príncipe Carlos y Lady Diana.
Es una de las iglesias más grandes de la ciudad y tiene una planta en forma de cruz. Lo más destacado es su cúpula y sus tres galerías circulares. Además, hay una audioguía gratuita en la entrada
Al lado de la catedral, está el puente colgante peatonal famoso por la película de Harry Potter, el Millennium Bridge.
Cruzamos el puente y encontramos el Tate Museum (también gratuito). El Tate Museum es el museo contemporáneo de la ciudad y se encuentra en una antigua central eléctrica remodelada. En él encontramos artistas como Picasso, Dalí o Warhol
Si tienes hambre, puedes ir a Borough Market, un mercado con una amplia selección de productos y muchos puestos de comida
Si te apetece subir a otro mirador, cerca se encuentra The Shard, el rascacielos más alto de la ciudad, y se puede subir al piso 72 para tener una increíble vista de Londres y, sobre todo, del puente de Londres. Este mirador no es gratuito y la entrada cuesta £32 (casi 38 euros).
De allí volvimos al centro y acabamos, nuestra ruta por Londres ese día, paseando (y haciendo algunas compras) por Oxford y el barrio de Covent Garden.
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